28 de junio de 2009

Punto y coma (el que no se escondió se embroma)

El sábado me despertó Madre. Mientras intentaba captar mi atención, decía: "Te mandaron una encomienda, te mandaron una encomienda". Cuando logré entreabrir mis ojos, observé que Madre estaba sonriente con esa papeleta (ver foto) en su mano. Mientras yo trataba de comprender si estaba en medio de un sueño o en medio de la realidad más absurda, Madre me dice: "Apu (léase: el encargado de mi edificio, al que hemos bautizado con el nombre del dueño del minisuper de los Simpson porque habla igual) me entregó esta constancia para vos. Dice que la trajeron hoy y que tenes que ir al correo central para buscar la ecomienda, pero que no podes ir sola porque pesa 1.000 kilos".
Ante lo alarmante del número me despabilé de golpe. En el lapso que duró entre la enunciación de esa frase hasta el instante en que llegué a leer la constancia, ésto es lo que se cruzó por mi cabeza:
1. Si un tigre de SIberia pesa 220 kgs, bien podrían haberme enviado 4 tigres de Siberia más un perro (pobre perro, no creo que siga vivo en medio de los 4 felinos).
2. Como un hipopótamo pesa 2100 kgs, no podía formar parte de mi encomienda, pero un hipopótamo enano pesa sólo 240 kilos. Entonces bien podría obtener, 4 hipopótamos enanos o dos hipópotamos más dos tigres (o todas las combinaciones posibles entre estas dos especies animales, sin excederme de los 1.000 kilos).
3. Un elefante pesa 7.500 kilos, así que lo tuve que descartar de una (maldición, nunca podré ser la dueña de Dumbo, ni de Jumbo).
4. Una jirafa pesa entre 800 y 1200 kilos, así que si consigo una jirafa de 1.000 kilos, es mía.
5. El peso de un piano es de 200 kgs, así que bien podrían haberme mandado 5 pianos o una jirafa más un piano o un tigre, dos hipopótamos y un piano, podemos sumarle el perro y mi encomienda tiene toda la onda.
6. Un auto de F1 con piloto incluído (por ej. el Brawn GP con Jason Button) pesa 655, 5 kgs, y todavía le puedo agregar el hipopótamo enano (groso).
7. El David, de Miguel Angel, pesa 5.5 toneladas. Sin dudas no me mandaron esa escultura, podrían haberme enviado un brazo de la misma, pero mejor no... o todo o nada.
Cuando tomé la papeleta, advertí que claramente y sin lugar a dobles interpretaciones decía: "Peso: 1,000 y no Peso: 1.000" lo que me demostró que el Apu no sabe diferenciar un punto de una coma ni leer cifras; pero me devolvió el alma al cuerpo, aunque también me dio un poco de pena por perder mi zoológico exótico. También me di cuenta que la felicidad pesa exáctamente 1 kilo.

4 comentarios:

Faby dijo...

Que pena!! Yo queria una jirafa

Ana dijo...

Y qué era?!?!? Ahora me muero de intriga!

No me digas que todavía no fuiste al Correo...

La Oveja dijo...

no hay jirafas de 1 kilo?

que era? porque un kilo de felicidad me da a pensar muuuuuuuuuuuuuuuuuuuchas cosas...

mauro dijo...

creo que hay muchas cosas buenas por 1 kilo, tan o más buenas que el zoo